Dice el apóstol Pedro que nuestra fe, es probada, como el oro que es probado por fuego (1 Pedro 1: 7 ) Entonces la fe se prueba através de las dificultades y por lo que hacemos, cuando decimos que tenemos fe. Este tema de la fe y las obras es considerado como la mejor evidencia que estamos frente a alguien que cuando dice que tiene fe, lo debe mostrar por sus hechos. ( Santiago 2: 14-26 )
Martín Lutero quien para su felicidad y salvación, descubrió que la salvación es por gracia, por la fe y no por las obras, es decir lo que nosotros podamos hacer para salvarnos. Al leer esta carta tuvo su disficultad para reconciliar estos dos puntos, la fe y las obras. Pero hoy entendemos claramaente que lo que dice Santiago, que si alguno dice que tiene fe y no se ven las evidencias de esa fe, es una fe muerta ( v. 17 ) Pero alguno dirá: Tu tienes fe, yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tu obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras ( v. 18 )
En este caso particular el apóstol esta relacionándolo con la caridad cristiana, frente a las necesidaes de los hermanos en la fe. Como dice él: No puedo decirle a un hermano necesitado: ve calientate y alimentaté, cuando no tiene nada de esto ese hermano para suplir esas necesidades, y yo pudiendo ayudarlo no lo hago. Como se nos prueba la fe en estos casos, generalmente no vemos estas situaciones en la iglesia, pero si mucho fuera de ella. En todos los caso Jesús dijo: Pobres siempre tendréis entre vosotros, y cuando quieras hacerles un favor, lo podés hacer. Por eso dijo también: Al que te pida dale y al que quiera tomar algo de lo tuyo no se lo niegues. Confieso allí sí que es probada nuestra fe, como respondemos en estos casos.
